Clases de zoología 1:
Y por buitre no me refiero al ave de rapiña de cabeza calva, sino a la clase de personas a las que se refiere el apartado "Curiosidades lingüísticas" del enlace anterior. Aunque bien pensado, eso de aves de rapiña les viene bastante al pelo.
Hay dos categorías de buitre, según mi humilde opinión, los inteligentes (los más peligrosos) y los idiotas (que pueden causar ataques de risa mortales, así que no subestiméis su peligrosidad).
El modo de actuar de los buitres inteligentes es sutil, aunque el resto de gente suele advertir su comportamiento, su víctima normalmente no se da cuenta a tiempo, y tampoco hace caso de las advertencias.
El buitre inteligente, aprovecha para atacar a su objetivo cuando éste pasa por una situación personal difícil, normalmente por una ruptura amorosa. Se infiltra en su vida, y lo colma de atenciones, de un cariño aparentemente desinteresado. Y lo hace poco a poco, haciéndose imprescindible e importante, para finalmente, cuando ve que es el momento propicio, atacar.
La sutileza es importante, porque suelen alegar que se han "enamorado" en el transcurso de esa amistad, aunque realmente el objetivo ya lo tenían marcado incluso antes de la ruptura. La víctima suele caer en su trampa precisamente por pensar que ha sido algo desinteresado, y porque se ha ganado su confianza y estima.
Los buitres idiotas, por el contrario suelen ser igual de sutiles que un elefante en una cacharrería, así que verles venir es bastante fácil.
El buitre idiota ataca en las mismas situaciones que el inteligente, sin embargo descubre sus cartas nada más comenzar el juego. Seguramente la intención será aturdir a su víctima cuando aún está pasándolo mal, sin darse cuenta de lo evidente que resulta su plan.
El buitre idiota sieeeeeeempre está muy muy muy enamorado de su objetivo desde hace tiempo, y precisamente por eso (supuestamente) no puede esperar para decírselo.
El buitre idiota es romántico por naturaleza, y lo dice sin vergüenza, para que su víctima sepa lo buen partido que es.
El buitre idiota quiere estar con su víctima, pero no puede esperar, porque ya ha esperado mucho (el objetivo, claro está, es caerle encima antes de que se de cuenta de que el buitre no es su única oportunidad, o incluso de que sola tampoco se está mal).
El buitre idiota no duda en traicionar a un amigo.
El buitre idiota a veces incluso "sabe" que su víctima se sentía atraída por él. El buitre idiota sabe muchas cosas, o eso cree.
El buitre idiota se cree grande, se cree deseado, y no duda en hacerlo saber.
Con lo que el buitre idiota no cuenta es con que su plan se ve a 100 km de distancia, y aún en el muy improbable caso de que su objetivo no sepa verlo, todos los que le rodean sí lo verán, y por supuesto se lo dirán, siempre que las risas que provocan su lastimosa actuación no provoquen muertes fulminantes.
Porque ante todo, el buitre idiota olvida que es un payaso, un payaso muy patético.
Va por tí.